Lenguaje de los colores según su dimensión

Lenguaje de los colores según su dimensión.

Los colores tienen su simbología, seguramente esto ya lo sabías, pero ¿habías notado que su nivel de intensidad es una condición decisiva en su mensaje?
No es lo mismo un rojo vibrante que capta la atención y denota fuerza versus un rojo oscuro que te transporta a un estado más serio o un rojo claro (rosado) que te conecta con la delicadeza y dulzura. En sí, todos están en la gama del mismo color, pero el efecto de comunicación es muy diferente. Echa un vistazo aquí abajo y piensa en lo que te evoca:
 
 

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Es apasionante ver cómo la imagen se expresa a través de símbolos, término mejor conocido como “semiótica de la imagen” y los colores hacen parte fundamental de esta comunicación ya que tienen un efecto psicológico en las personas al desencadenar en nosotros emociones y estados de ánimo: pueden calmar o estimular.

 

Los colores tienen su cometido

Los colores poseen un lenguaje propio donde hay que tener en cuenta la temperatura y su intensidad. Cada color tiene su cometido, una función, que permite mejorar o potenciar la imagen de nuestros clientes y por supuesto, la nuestra.

Encontraremos los antecedentes de esta visión holística en Goethe (Johann Wolfgang von Goethe) quien estudió el color como sensación y nos dejó su libro Zur Farbenlehre (Teoría de los colores), escrito en 1810.

Goethe estudió y probó las modificaciones fisiológicas y psicológicas que el ser humano experimenta ante la exposición a diferentes colores, y su investigación fue la piedra angular de la actual psicología del color.

Para ello, desarrolló un triángulo tomando como base los tres colores primarios y lo usó como un diagrama de la mente humana; de esta manera relaciona cada color y combinación con ciertas emociones (lúcido, melancólico, poderoso, sereno y serio). ¡Interesante! ¿Verdad?

Si investigas más de Goethe y su triángulo, notarás que puedes relacionar el juego de colores que hace con la personalidad presente en los 7 estilos de la imagen.

 

Cómo funcionan los colores

Para poder entender bien esa “percepción” de los colores, hay que tener en cuenta varios aspectos y matices que van a permitirnos comprender mejor nuestro trabajo con ellos y asesorar a nuestros clientes. Cada color tiene una temperatura y una intensidad y la mezcla de ambos aspectos provoca sensaciones.

La temperatura:

En imagen la primera categorización de colores que hacemos es por temperaturas.
Los colores fríos son aquellos que en su composición contienen más pigmento azul. Los cálidos son los que en su composición contienen más pigmento amarillo.

A nivel iconológico esto es lo que trasmiten las categorías por separado:

 

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La intensidad

La segunda categorización importante que tenemos en cuenta en imagen es la intensidad del color. En este caso no miramos si los colores son fríos o cálidos, sino que observamos si son claros u oscuros, opacos o saturados. Estas variaciones dependerán de la cantidad de blanco, negro o gris que le aportemos al color. De esta forma, los claros son los que contienen más porcentaje de blanco; los opacos, los que tienen más porcentaje de gris, los oscuros más porcentaje de negro, y los saturados, los que poseen un pigmento puro y son más visibles que los anteriores.

A nivel iconológico esto es lo que transmiten las categorías por separado:

 

 

Los colores claros sugieren liviandad, descanso, suavidad y fluidez. Se parecen a las cortinas transparentes de una ventana, y envían un mensaje de honestidad y distensión.
Los oscuros y opacos denotan formalidad y seriedad.

Y los colores saturados son vívidos, transmiten mucha energía y sin lugar a duda atraen la atención generando un punto focal.

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Temperatura + intensidad

Pero la temperatura y la intensidad siempre van de la mano, así que aquí tienes un cuadro que te explica la imagen transmitida según la mezcla:

 

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Como puedes ver, en términos de imagen efectiva no podemos tomar a la ligera que un color es bueno o malo, todo depende del contexto, esto es clave y será un diferencial de valor cuando se lo expliques a tus clientes. Así que el contexto es el criterio para determinar si un color resulta agradable y correcto o falso y carente de gusto.

 

Referencia:
Vilallonga, A (2018) “#MIRATE”
Gordoa, V.: (1999) “El poder de la imagen pública”
Goethe, J. Color, el diagrama de la mente humana de Goethe.

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